El ácido ferúlico se encuentra naturalmente en la pared celular de las plantas y su función allí es proteger y preservar. En el mundo del skincare, hace precisamente eso también: proteger y conservar la piel. Aplicado tópicamente, el ácido ferúlico, al ser un antioxidante, puede proteger contra los radicales libres y ayudar con el rejuvenecimiento de la piel. Además, mejora los signos del envejecimiento prematuro, reduciendo la apariencia de líneas finas y arrugas mientras mantiene la piel fuerte y firme.
En los sérums, el ácido ferúlico tiende a funcionar bien con otros ingredientes antioxidantes, especialmente con la vitamina C, la cual no es muy estable por sí sola, pero se cree que el ácido ferúlico ayuda a estabilizar la vitamina C, al mismo tiempo que aumenta su capacidad de minimizar el daño solar. Es importante señalar que esta fotoprotección aumenta cuando se combina además con vitamina E.
¿Cuándo usarlo?
Puedes usarlo en tu rutina de la mañana y así combatir los factores ambientales durante el día, y no olvidar aplicar protector solar.
¿Cómo aplicarlo?
Empieza a usarlo 2 o 3 veces por semana para observar la tolerancia. Si es que tienes la piel sensible, te recomendamos probarlo primero.
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